El volcán
El volcán🌋
Cerca
del lago de Texcoco, había un volcán que hace mucho tiempo que no hacía
erupción. En el lago habitaban diversas criaturas como: peces, tortugas, ranas
y patos pero ninguno era tan poderoso como la bestia que también habitaba en el
lago, se hacía llamar Érebo y creía que nadie era mejor que él, no convivía con
nadie porque todas las criaturas le tenían miedo, su longitud era enorme y su
apariencia espantosa; además de que no se preocupaba por nadie más que de sí
mismo.
Una
mañana aparentemente tranquila, el volcán hizo erupción y comenzó a soltar
lava, no tardaría mucho para llegar hacia donde estaba el lago y destruiría
todo a su paso. Todas las criaturas estaban aterrorizadas, incluido Érebo, pues
su mayor debilidad era el fuego o cualquier cosa que tuviera que ver con el
calor; aun así Érebo se armó de valor y con su hocico comenzó a lanzar agua del
río para que la lava cesara pero no funcionó, cada vez estaba más cerca y al
ver que no podía hacer nada comenzó a nadar lo más lejos posible, pero comenzó
a escuchar los lamentos de sus compañeros y no pudo contenerse, le llegó un
remordimiento y regresó para salvarlos, a pesar de que los demás temían ser
devorados por Érebo aceptaron su ayuda y se montaron a su espalda. Érebo
comenzó a moverse muy rápido en el lago
pero nunca había nadado más allá de donde el acostumbraba a estar,
afortunadamente los patos lo fueron guiando y llegaron a un lugar seguro,
afortunadamente la lava se detuvo a mitad del lago y todos lograron salvarse,
los animales estaban agradecidos con Érebo por salvar a todos:
Fuiste
muy valiente al intentar detener la lava- dijo la señora rana.
Quería
hacerlo pero estaba muy asustado- dijo Érebo expresando un poco de tristeza.
No
importa si no pudiste, ¿no te das cuenta?, nos salvaste la vida, fue un acto
hermoso, todos lamentamos haber dudado de ti- dijeron el señor y la señora
pata.
No
podía dejarlos, la vida de todos estaba en riesgo. Siento mucho el
comportamiento que tuve, todos me tienen temor y prefería estar solo- dijo
Érebo.
Pues
ya no estarás solo nunca más, ya tienes nuevos amigos- dijo la señora tortuga
de manera alegre.
Moraleja:
Después
de lo acontecido, todos se asentaron lejos de los volcanes y se hicieron muy
buenos amigos, Érebo comprendió que lo más importante no es el amarse a sí
mismo o creerse mejor que los demás, lo más valioso es la amistad y ayudar al
prójimo cuando lo necesite; y el resto de los animales también se llevaron su
lección y es no juzgar a nadie por su apariencia porque pueden hacer sentir mal
a los demás.
Autora: María Fernanda Martínez Vélez.
"La fábula de los cangrejos"🦀
Por José Joaquín Fernández de Lizardi.
Habla sobre un grupo de cangrejos que se cuestionaban sobre el porqué siempre caminaban de lado y querían corregir esa forma tan peculiar de andar, y un cangrejo más grande se acercó y propuso que la mejor forma de corregir ese "vicio" era instruir a los cangrejos más jóvenes, ya que para los cangrejos adultos no había posibilidad de corregir eso. Entonces los cangrejos padres comenzaron a persuadir a sus hijos para que comenzaran a caminar derechos, pero como nunca les pusieron el ejemplo, los cangrejos más pequeños solo hacían lo que veían y no lo que escuchaban.
Moraleja: El mejor aprendizaje se da cuando ponemos el ejemplo, si no, no dará frutos la enseñanza.
Vocablos:
- Machucho: que es mayor o maduro.
- Despilfarro: gasto excesivo de tiempo, dinero, energías, bienes, etc.
¡Hola Fernanda! Mi comentario: Bien recreada, escrita y redactada la fábula. Buena ortografía, pero con escaso uso palabras regionales. No olvides los pies informativos de las imágenes. La próxima vez quita los subrayados para hacerla visualmente más legible. Una fábula debe ser aleccionadora y redactada de manera concisa y contundente. Y gracias por las tres moralejas. Gracias por compartir tu bestia. Saludos cordiales.
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